Aun
habiendo crecido más del doble en estos últimos diez años las tarjetas de crédito deben afrontar en breve la
competencia de nuevos modelos de pago. Llegan las nuevas fórmulas para las
nuevas generaciones.
En
este artículo de Eugenio Mallol de El País podemos vislumbrar muy bien cuáles
serán las nuevas tendencias para el pago en un futuro no muy lejano. El
"selfie pay" y otras fórmulas se posicionan como inminentes.
Por Barcala&Partners.
Más allá de la
tarjeta de crédito física, así se diseña el futuro en Mastercard Labs...
Llega el Selfie Pay, usuarios identificados
por el ritmo cardiaco, máquinas de vending que hablan con el móvil,
aplicaciones para pagar antes, durante o después de la compra... el laboratorio
donde se diseña la revolución de los medios de pago.
EUGENIO
MALLOL (MADRID)
@eugemallol
«¿Cuándo
desaparecerá la tarjeta de crédito física?», le pregunto al irlandés Kevin
O'Connell, vicepresidente y jefe de Innovation Labs de Mastercard Labs. «Esa es
una pregunta fenomenal». El sector de los medios de pago mantiene cautela y
prefiere no anticipar acontecimientos. El destino de la tarjeta de plástico lo
va a decidir la llamada generación millennial y nadie se atreve a predecir
exactamente cómo comportará.
«Mi
hijo tiene ahora 14 años, cuando llegue a los 21 años y empiece a tener
trabajo, ¿interactuará más? ¿Usará más el plástico que el digital o el digital
más que el plástico? Hay mucha especulación, lo que tenemos claro es que lo
digital adquirirá una presencia masiva en la actividad diaria del consumidor,
particularmente de los que se incorporarán al mercado, los que tengan 22 años
en 2020», dice O'Connell.
El
asunto se complica porque en los próximos años se espera la conexión de 2.500
millones de personas a internet. Uno de los mayores desafíos tecnológicos y
económicos de la era moderna. ¿También ellos preferirán medios de pago
alternativos a la tarjeta física?
«Creo
que sí la utilizarán, pero incorporarán otras experiencias de pago basadas en
el móvil», apunta el vicepresidente de MasterCard Labs, «se trata no tanto de
acabar con lo que hay, sino de la inclusión financiera mediante nuevos
instrumentos de pago, que mejoren los servicios para esa enorme cantidad de
gente que no tiene acceso a ellos». Ese es uno de los motivos de la apertura de
un Lab en Nairobi (Kenia), con apoyo de la Gates Foundation.
Edgar
Aguilar, responsable de Enterprise Security Solutions de MasterCard a nivel
global, augura «nuevos modelos de negocio, nuevos medios de pago y nuevas
experiencias de usuario», a propósito de esta revolución, «en cinco años se
verán más disrupciones que en los últimos 50».
Pero aún hay un tercer factor de
complejidad. Se llama Internet de las Cosas. O'Connell y el presidente de la
división de Europa Occidental de Mastercard, Carlo Enrico, recitan en distintos
momentos lo que ambos describen como el nuevo mantra en la compañía:
«Cada
dispositivo conectado puede convertirse en un dispositivo comercial». Ahí es
nada.
Kevin O'Connell tras la clausura del evento PayTech en Madrid. S. E.- N. |
«Cada
dispositivo conectado puede convertirse en un dispositivo comercial», este es
el mantra en toda la compañía.
Con
todos esos desafíos en el horizonte, es natural que Mastercard y el resto de
actores del mercado dirijan su miradas hacia la gente de sus laboratorios y
hacia el talento innovador disponible en todo el planeta, en busca de
soluciones.
O'Connell
advierte de entrada de que, en el subsuelo de toda su actividad de
investigación y desarrollo, está la idea de que «cuando usas la tecnología
aspiras realmente a tener una mejor experiencia de usuario que la que tienes
cuando usas la tarjeta física, porque los dispositivos son inteligentes». Una
de las grandes tendencias actuales es, por eso, «añadir valor antes, durante y
después del pago, permitiendo que éste suceda en el momento que más se ajuste a
las necesidades del usuario, muchas veces antes de la compra».
Por
áreas de trabajo, MasterCard se aproxima al Internet de las Cosas «por
segmentos»: las máquinas de vending, el coche conectado y el hogar conectado.
Pero «donde estamos poniendo el foco y empezarán los pilotos el próximo año es
en una solución realmente low cost para conectar las máquinas de vending
existentes».
Se
trata de incorporar un puerto estándar, que cuesta apenas unas decenas de
dólares, llamado MDB (Multi Drive Box) al sistema de recepción de monedas. El
consumidor, utilizando una app del móvil se conecta con la máquina vía
bluetooth y compra. Toda la conversación está encriptada.
«Las
máquinas de vending serán el gran banco de pruebas para el Internet de las
Cosas», sentencia O'Connell. Tiene sentido: hay 20 millones de máquinas en todo
el mundo, y apenas un 15% están adaptadas a las tarjetas físicas. La clave de
la solución MDB es que «el sistema que nosotros integramos en la máquina no
necesita estar conectado, sino sólo ser capaz de hablar con el dispositivo
móvil del consumidor».
También
en el ámbito del Internet de las Cosas, MasterCard ha diseñado, en colaboración
con el fabricante de lavadoras Whirlpool, un modelo conectado que se ha
incorporado ya a la cadena de lavanderías de Maytag en EEUU. Se han acabado las
esperas para sus clientes: ahora reservan el lavado por el móvil, que les avisa
de cuándo está lista la ropa y realiza el pago.
En
cuanto a la Experiencia de Usuario, preocupa mucho en MasterCard la cuestión de
cuidar el antes, el durante y el después con los nuevos sistemas digitales.
Considera un éxito el lanzamiento de aplicaciones como Pay-At-Table en junio
pasado y, sobre todo, de Qkr!, de la mano de la cadena de restaurantes
wagamama. El consumidor indica su código al camarero y se van realizando los
cargos conforme se realizan los pedidos. Al término de la comida no es
necesario esperar los 10 minutos de media que tarda en gestionarse la recepción
y el pago de la cuenta. En el estadio de los Yankees en Nueva York, los aficionados
pueden encargar la bebida y los snacks y decidir cuándo los quieren tomar. El
cargo se hace en su cuenta vía MasterPass de forma automática.
Las
tecnologías de seguridad son claves para cimentar la confianza del consumidor
en el tránsito al nuevo entorno digital. MasterCard quiere que su plataforma
MDES (Digital Enablin Services), que enmascara el número de cuenta creando otro
similar llamado Token y que ha integrado en ApplePay, se convierta en «el
sistema operativo de los pagos seguros del futuro», según O'Connell.
No
obstante, la carrera más apasionante se desarrolla ahora en el ámbito de la
Biometría, con la implicación de empresas biotecnológicas y médicas
(«tecnologías que no eran mainstream se están convirtiendo en mainstream»).
MasterCard tiene muy avanzado el trabajo con la startup canadiense Nymi, que ha
desarrollado un sistema de autenticación del usuario integrando la tecnología
EasyG de monitorización del ritmo cardiaco. Es un paso adelante sorprendente:
integrado en un dispositivo wearable, no hará falta utilizar sistemas de
escaneado, como los del iris o la huella dactilar, porque será Nymi quien
autentique.
En
el segundo trimestre de 2016, MasterPass incorporará lo que Aguilar describió
como el Selfie Pay, un sistema para verificar la identidad del usuario haciendo
una fotografía con el móvil. Según explica Edgar Aguilar, «se aplicará un
algoritmo tras registrar una serie de puntos de seguridad en la cara» para
garantizar la seguridad.
A
expensas de garantizar la seguridad
LOS
DATOS. Edgar Aguilar señala que «5,7 céntimos de cada 100 dólares gastados en
las principales tarjetas globales se pierden en fraude». Y añade: «En torno a
2.000 registros son violados por minuto», de ahí que uno de los grandes
desafíos de la industria de los medios de pago sea «mantener la confianza del
consumidor» LA GARANTÍA. Kevin O'Connell tranquiliza: «Todos los sistemas de
seguridad que existen en el mundo físico, cuando utilizas una tarjeta de
plástico en un entorno comercial, al menos están replicados, cuando no ampliados,
en el mundo digital». LAS SOLUCIONES. Carlo Enrico define la biometría como
«una de las grandes tendencias en los próximos años», y habla de sistemas para
integrar la huella dactilar en la tarjeta.
Fuentes de la Información:
El País.
Helpmycash
Artículo:
Pasado, presente y Futuro de las tarjetas de crédito.
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